El discurso del presente trabajo, Pintura mural y publicidad exterior. De la función estética a la dimensión pública, se articula desde la premisa que defiende una relación secular entre arte y funcionalidad, ya establecida por la pintura mural en el Paleolítico Superior. Al analizar una pintura mural de carácter monumental, queremos decir de superficie considerable, ubicada en el espacio público e integrada en el edificio que la sustenta y en la arquitectura del entorno, observamos que coexisten, al menos, tres tipos de funciones: la función estética, la función decorativa y la función publicitaria. La aridez de esta conclusión nos obliga a trazar un recorrido cronológico para demostrar los sucesivos desplazamientos funcionales que ha sufrido la pintura mural a lo largo de la Historia. Paralelamente, otras aproximaciones al núcleo de nuestra hipótesis, nos llevan a situar a la pintura mural y a la publicidad exterior en lugares antinómicos de lo que genéricamente puede entenderse como el mundo de la imagen. La pintura y la publicidad son dos actividades del intelecto distintas y autónomas, en ningún caso debe hablarse de identidad; pero ello no es óbice para trazar relaciones entre la pintura mural y la publicidad exterior, bien sabido es que durante el siglo XX, las contaminaciones y trasvases entre el Arte y la Publicidad han sido mutuos y recíprocos. Las diferencias de fondo entre el arte y la publicidad, básicamente, hacen referencia a la intencionalidad y el uso de la imagen y la palabra. La imagen publicitaria y la pictórica comparten aspectos morfológicos (relaciones de color, equilibrio y dinámica de las masas, valores tonales, textura, etc.) pero se diferencian en el aspecto semántico. Ambas, con o sin texto, se insertan dentro de mensajes; el mensaje publicitario resulta necesariamente descodificable con respecto a un código convencional, conocido por el emisor y el receptor. La publicidad debe significar con claridad, los mensajes emitidos deben ser entendidos por miles de consumidores de diferentes culturas y clases sociales. El mensaje artístico, si podemos llamarle así, es ambiguo y polisémico (particularmente en la obra de arte contemporánea) y se caracteriza fundamentalmente por la destrucción o instauración de códigos privados, funciona como un simulacro de comunicación al no cerrar el circuito. También es común el provecho de la retórica poética en pintura y publicidad, compartiendo figuras con propósitos divergentes: metáforas visuales, metonimias, elipsis, lítotes, repeticiones e hipérboles. Nuestro método de trabajo enfrenta dialécticamente las categorías "pintura mural" y "publicidad exterior"; comienza la primera parte por definir nombres y establecer una clasificación general y de revisión histórica de los soportes de la imagen; con la intención de acotar las funciones desempeñadas por esta en ámbitos tan aparentemente dispares; continua con el razonamiento aislado de sus fundamentos, e investiga sobre las herramientas utilizadas en la historia de la producción de imágenes, para perfilar las especificidades, las coincidencias y las divergencias entre el mural y la valla publicitaria. En la segunda parte de la investigación analizamos imágenes de reconocidos publicistas: Bill Bernbach y Danny Doyle, Jay Chiat y Guy Day, Leo Burnett, Charles y Maurice Saatchi, y Oliviero Toscani. Elegidos en función de: su datación cronológica, desde los años 60 a los 90 del siglo XX; su relevancia respecto a los enlaces entre arte y "el concepto de publicidad creativa"; y su adecuación para justificar los desplazamientos funcionales en el uso de la imagen. La tercera parte de la tesis supone una aportación práctica: incluye dos proyectos de intervención con imágenes digitales realizadas por impresoras ink jet de gran formato, a base de tintas solventes sobre lona micro perforada montada en andamio o bastidor metálico, cuando este se instala durante meses en fachadas sometidas a procesos de limpieza o rehabilitación. Consideramos pertinente su orientación de proyecto didáctico por lo novedoso del soporte y la posibilidad de ofrecer nuevos campos de actuación. Los otros dos proyectos presentados son murales, elaborados con pintura al silicato sobre muros de cemento y hormigón; proyectos llevados felizmente a término durante el curso 2004- 2005, por los alumnos de la signatura Pintura y Entorno, del Departamento de Pintura de la UPV; ambos murales se pintaron en espacios públicos cumpliendo funciones decorativas.