RESUMEN Se han utilizado materiales inorgánicos porosos como matrices rígidas para encapsular una serie de polímeros orgánicos conjugados en el interior de sus poros. El objetivo de esta estrategia sintética es aumentar la fotoestabilidad y la resistencia química de los polímeros al O2 y a la humedad, de modo que se preserven sus propiedades conductoras, fotoquímicas u optoelectrónicas. En todos los casos, el polímero se ha preparado mediante la polimerización in situ de precursores monoméricos adecuados, previamente adsorbidos dentro de los poros de matrices inorgánicas convenientemente funcionarizadas para contener los centros activos para promover la polimerización. Como anfitriones sólidos se han usado faujasitas X e Y, zeolitas deslaminadas ITQ-2, montmorillonita, materiales mesoporosos MCM-41 y esferas huecas monodispersas de sílice amorfa. Como huéspedes poliméricos se han preparado varios polímeros ?-conjugados, elegidos teniendo en cuenta su conductividad eléctrica o propiedades fotoquímicas y sus potenciales aplicaciones tecnológicas. En particular se han sintetizado con éxito: i) el poli(fenilenovinileno) puro (PPV) y 2,5-alcoxi-derivados; ii) el poli(2,6-naftalenovinileno), un polímero análogo al PPV pero con grupos naftaleno en lugar de grupos fenileno intercalados a la cadena vinilénica; iii) una serie de derivados de poliacetileno conteniendo naftaleno, fenantreno y tiofeno como grupos laterales, así como el poli(dietinilbenceno), que tiene varias posibilidades de polimerizar que pueden verse influenciadas por la geometría impuesta por la matriz hospedadora; y iv) el poli(etilen dioxitiofeno) (PEDOT). Los polímeros derivados del PPV de los grupos i) y ii) son interesantes debido a sus propiedades fotoquímicas o electroluminiscentes, mientras que los poliacetilenos (grupo iii) y el PEDOT son reconocidos conductores eléctricos. Para cada caso individual, la elección de la matriz inorgánica más apropiada para cada polímero se ha hecho en base a la estructura del precursor monomérico usado (carga eléctrica y dimensiones) y del mecanismo de polimerización (catalizada ya sea por base o por centros ácidos de Lewis). Los materiales compuestos orgánico-inorgánicos resultantes se han caracterizado extensamente mediante técnicas espectroscópicas y métodos analíticos, con especial atención en sus propiedades fotoquímicas (o conductivita eléctrica) y en su estabilidad en comparación con los polímeros no encapsulados. Todos los resultados obtenidos son consistentes con el hecho de la polimerización, muy probablemente dentro de los poros del material. Es de destacar que nuestros estudios mediante fotólisis de destello láser indican que en general la matriz inorgánica juega un papel activo en la estabilización de los estados de separación de carga (polarones) que se forman por irradiación de los polímeros encapsulados. Al mismo tiempo, el material protector impide que el O2, el H2O y otros contaminantes atmosféricos puedan difundir desde el exterior, con lo que se evita la desactivación del polímero debida a la adición oxidativa a los enlaces C-C insaturad