El paisaje puede dividirse en zonas o porciones con características homogéneas llamadas unidades de paisaje. Los aspectos que definen la homogeneidad de estas unidades dependen de la escala de análisis. Tradicionalmente, la unidad se ha concebido como un concepto flexible que se adapta a las diferentes escalas, objetivos y características del territorio. Sin embargo, cuando la unidad se entiende no sólo como una herramienta de análisis para los técnicos sino como un elemento exigido por la legislación medioambiental como es el caso de la Comunidad Valenciana, parece necesario encontrar criterios que garanticen la coherencia entre unidades de paisaje delimitadas en territorios diferentes. Este trabajo tiene como objetivo la búsqueda de criterios para la definición de unidades de paisaje en las diferentes escalas de análisis y consta de dos partes. En la primera, se identifican las principales tendencias existentes en la práctica de la delimitación de unidades a partir del análisis de una muestra de trabajos realizados en la geografía española. Los aspectos considerados en el análisis son: ámbito territorial, escala, geomorfología, matriz territorial y límites visuales. La interpretación de las relaciones entre estos aspectos se lleva a cabo con la ayuda de la técnica Análisis de Correspondencias Múltiples. Los resultados muestran que, a pesar de no existir unos criterios comunes en la delimitación de unidades, se puede deducir una jerarquía implícita en la forma en que los técnicos españoles están delimitando las unidades de paisaje. Ésta es más aparente en los aspectos relativos a la geomorfología y menos evidente en los relativos a la matriz territorial. En cuanto a los límites visuales, su papel está poco definido y en general no son frecuentes en las escalas pequeñas asociadas a ámbitos nacionales y regionales. A partir de los resultados obtenidos en este primer análisis, en la segunda parte, se profundiza en los aspectos relativos a la homogeneidad del carácter o estructura paisajística en la escala local. Se asume que a partir del análisis de la estructura paisajística de territorios concretos, se pueden deducir criterios generales para la delimitación de unidades de paisaje. Para ello, se elige como zona piloto el término municipal de Chiva (Valencia) de gran diversidad paisajística. Los dos aspectos que se consideran en el análisis de las estructuras paisajísticas son el tipo de elementos paisajísticos y las combinaciones de estos elementos. Estas últimas se identifican con el apoyo de índices cuantitativos de estructura del paisaje calculados sobre dos tamaños de malla cuadricular diferentes (1km2 y 0,25km2) y las técnicas de análisis de datos multivariante: Análisis de Componentes Principales, Método de las k-medias y Clasificación Jerárquica Aglomerativa. Los resultados muestran la potencialidad de este tipo de procedimientos para la identificación objetiva de zonas con una estructura paisajística homogénea. A partir de la clasificación de estructuras de Chiva, se identifican factores responsables de la diferenciación de tipos de paisaje a escala local que pueden reiterarse en otros territorios de la Comunidad Valenciana.