Resumen:
|
[ES] La logística se ha convertido en uno de los factores clave de éxito en el sector de la alimentación perecedera. Las actividades que incluye aportan valor añadido al producto final, ya que determinan el tiempo que ...[+]
[ES] La logística se ha convertido en uno de los factores clave de éxito en el sector de la alimentación perecedera. Las actividades que incluye aportan valor añadido al producto final, ya que determinan el tiempo que cuesta ponerlo en el mercado así como sus características físicas, siendo por ello una fuente de ventajas competitivas para la industria alimentaria. Los servicios logísticos son subcontratados cada vez más con operadores especializados, los llamados Operadores Logísticos de Frío, ya que la prestación del servicio con medios propios es ineficiente y viene desincentivada por el marco que regula dicha actividad. Subcontratar transporte y almacenamiento (servicios logísticos básicos) debería ser garantía de manipulación adecuada del producto y entrega en el momento requerido. Sin embargo, son múltiples los problemas que plantea la subcontratación: el carácter perecedero del producto, que requiere gran rapidez de movimiento y cuidado por parte del operador logístico; las inversiones en equipamiento especializado que es necesario acometer por parte del operador; y la adecuación a las exigencias sobre calidad que impone la gran distribución son los problemas de mayor importancia existentes. En consecuencia, esta realidad económica se caracteriza por la presencia de costes de transacción positivos, derivados de la presencia de problemas contractuales tales como la inversión en activos específicos y las asimetrías informativas.
La economía neoinstitucional ofrece una base teórica sólida que resulta adecuada para explicar las decisiones organizativas y estos problemas contractuales de las empresas. En primer lugar, la prestación de servicios logísticos con medios propios es ineficiente y viene desincentivada por el marco que regula los distintos servicios logísticos. En segundo lugar, el hilo argumental institucionalista sobre el que se apoya este trabajo señala que para que externalización de la logística tenga éxito, el factor más importante será lograr el diseño de un contrato entre la empresa de alimentación y el operador logístico de frío que reduzca la incidencia de los citados problemas contractuales. Estas relaciones asimétricas entre las empresas son importantes en el caso de los productos perecederos, pueden ser de diversas clases y su nivel de incidencia varía de unas empresas a otras, lo que explica la existencia en la práctica de distintas estructuras de gobierno de la transacción. Esta diversidad contractual implica, en la medida en que la transacción esté más integrada en la empresa, que es más intensa la afectación del problema contractual que se pretende solventar, lo cual conlleva la posibilidad de ordenar dichos problemas contractuales relevantes en la transacción en función de su importancia para las partes.
En este contexto, el objeto del TFC consiste en explicar por qué difieren las relaciones asimétricas de unas empresas a otras dentro de la misma industria alimentaria. En este sentido, el elemento dimensión empresarial aparece aquí como un factor explicativo determinante. Expresado en otras palabras, ¿cuáles son las relaciones asimétricas que existen entre las empresas subcontratantes (empresa alimentaria) y subcontratadas (operador logístico de frío) en función del tamaño? Para dar respuesta a esta pregunta, este trabajo busca establecer algunas relaciones significativas entre el tipo de contrato y el tamaño de la empresa de alimentación que lo formaliza, lo que constataría la concurrencia de relaciones asimétricas en función del poder de mercado.
[-]
|